El mes de octubre se convierte en un mensajero de la prevención contra una de las enfermedades de mayor incidencia entre la población femenina: el cáncer de mama, que se ha convertido en la segunda causa de muerte de las venezolanas, y puede aparecer a cualquier edad.
Un diagnostico a tiempo puede hacer la diferencia. Los exámenes médicos regulares, actividad física y una alimentación balanceada disminuyen el riesgo. Por eso es importante que las mujeres conozcan cómo hacerse un autoexamen y que se realicen un chequeo médico anual para que un especialista evalúe su estado de salud.
Todos los meses, hazte un autoexamen para observar alguna irregularidad o cambio en tus senos. Está atenta a signos físicos como endurecimiento de la mama, cambios en el color de piel y el pezón, secreciones espontáneas, hendiduras o cambios en el tamaño y la forma de los senos.
Observa tus mamas mientras estás de pie. Pon las manos a los lados del cuerpo, luego en la cintura y después detrás del cuello. Revisa las mamas y las axilas.
Acostada, pon la mano derecha detrás del cuello y con la mano izquierda palpa toda el área de la mama derecha y la axila derecha; y viceversa. La palpación es muy sencilla: con la yema de los dedos vas moviendo circularmente la mano mientras presionas leve y luego más fuerte. Si sientes dolor o alguna protuberancia debes ir al médico y notificarlo.
Hazte una mamografía cada año. Si en tu familia hay antecedentes de cáncer de seno, debes decirlo en tu historia clínica y sin importar la edad es importante hacerte el chequeo anual. Una mamografía a tiempo puede detectar un tumor muy pequeño, incluso antes de que se pueda sentir al tacto. La recomendación es que toda mujer mayor de 40 años se haga una mamografía anual pero si hay factores de riesgo o antecedentes familiares, hazla antes.
Los factores de riesgo son: ser mujer, aunque 1% de los hombres también pueden sufrir cáncer de mamas, mujeres mayores de 40 años (a mayor edad, mayor riesgo), menopausia tardía, no haber dado lactancia, antecedentes familiares de cáncer, obesidad, vida sedentaria, estrés.
Alimentate bien y balanceado. Hay algunos alimentos que ayudan a prevenir los factores físicos del cáncer de mama como, por ejemplo, el tomate que contiene licopeno lo que aumenta los niveles de adiponectina, una hormona que influye en el metabolismo del azúcar y la grasa y reduce el desarrollo de tumores en los senos; el té verde contiene polifenoles que ayudan a frenar el desarrollo de las células cancerígenas en el seno; el brócoli tiene sulforafano que inhibe la producción de la enzima HDAC (es la que genera células malignas); el ajo queayuda a disminuir las células cancerígenas y finalmente las nueces porque tienen un alto contenido en ácidos grasos omega 3, fitoesteroles y antioxidantes, lo que hace más lento el crecimiento de cualquier tipo de tumor.
*Con información de Senosayuda
