Hablar otra lengua no solo representa una ventaja para tu desempeño profesional; aprender un idioma es también sinónimo de bienestar
Mucho se ha hablado de la importancia de aprender un idioma. Al lograrlo te vuelves más competitivo para el mercado laboral: puedes optar por más ofertas de empleo y hasta podrías llegar a conseguir un cargo en el exterior. A su vez, esta habilidad puede serte de gran utilidad al viajar. Por ejemplo: si visitas un país donde hablan un idioma diferente al tuyo pero que conoces, tu experiencia se enriquecerá, ya que podrás familiarizarte con sus costumbres y tradiciones. Además, hablar otra lengua es una herramienta fundamental para conocer personas alrededor del mundo y hacer nuevos amigos.
Sin embargo, los beneficios de aprender un idioma no se limitan solo a estos ámbitos de tu vida. Diversos estudios de universidades estadounidenses y británicas aseguran que hablar una lengua extranjera mejora todas las funciones cognitivas: atención, percepción, memoria, inteligencia y lenguaje. En este sentido, los científicos afirman que el aprendizaje de un dialecto diferente al materno altera positivamente la estructura cerebral, en concreto el área que procesa información. Pero eso no es todo. ¿Te animas a estudiar otro idioma?
Conoce todos los beneficios que puede representar para ti y tu salud el hecho de que lo hagas: