Liberty Mutual posee la página web Teen Driving Adolescente manejando, una excelente iniciativa para quienes desean enseñar a conducir a sus hijos. En esta ocasión, reseñaremos los tips más importantes de esta página Web.
Ilustraciones: Fernando Correa
Probar: comience por hacerle un test de manejo a su hijo. Conocer qué sabe el joven sobre un automóvil, los límites y las reglas de un conductor son fundamentales en la iniciación. Un conductor nuevo debe tener un modelo a seguir confiable. Los padres son el modelo más próximo en esta primera etapa.
Educar desde lo básico: buscar las leyes del Instituto de Tránsito Terrestre y encontrar una autoescuela es fundamental. Aprender ciertas normas y leyes antes de la primera clase de manejo, aclara las dudas y prepara al conductor adolescente para la prueba con la que optará por la licencia de conducir.
Mantener la calma: sentarse al volante de un automóvil por primera vez puede causar un poco de miedo. Recuerde y hágale saber a su hijo que aprender a manejar la maquinaria automovilística tomará tiempo y paciencia antes de dominar su operatividad. Entender que se pueden cometer errores al principio, es el consejo que todo padre debe dar a ese conductor joven.
Crear destrezas: lo preferible es optar por una autoescuela para tomar las primeras clases de manejo.
Expandir su campo de visión: es fundamental mantener la visión frente al vehículo teniendo en cuenta los objetos, personas y señales de tránsito que están alrededor.
Tener cinco ojos: siempre hay que tener en cuenta que nuestra visión en el automóvil es de 360º grados porque contamos con espejos retrovisores. Un conductor adolescente debe estar consciente del contexto del vehículo.
Tomar decisiones: observar las señales de tránsito y prever con tiempo el próximo movimiento a realizar con el vehículo, de esta forma, los demás conductores entenderán qué dirección seguir.
Ilustraciones: Fernando Correa
Planificar una ruta de escape: un conductor joven debe pensar en el futuro y permitirse con suficiente tiempo, espacio y visibilidad la posibilidad de realizar alguna maniobra sin problemas.
Paciencia: tanto los padres como el joven conductor deben tener paciencia durante las clases de manejo. Lo más recomendable, como es costumbre, es practicar hasta que el aprendiz pueda conducir solo.
