Educación

Cinco acciones para proteger el planeta Tierra

El mundo enfrenta varios flancos de amenazas ambientales. El cambio climático ha sido el gran tema dentro de las agendas en las cumbres internacionales para que los países con mayor desarrollo industrial cumplan el compromiso de tomar medidas al respecto.

Cada 22 de abril se celebra el Día de la Tierra pero el mejor regalo que podemos darle es tomar conciencia día a día de nuestras acciones porque con mejores hábitos cotidianos podemos disminuir nuestro impacto en este maravilloso espacio que nos permite la vida.

1) Menos basura, más reutilización. En Venezuela uno de los principales problemas es el mal manejo de los desechos sólidos que deriva en un incremento sostenido de la cantidad de basura diaria que genera la población. Si en cada hogar logramos disminuir los desechos que producimos y creamos el hábito en la familia de que traten de reutilizar muchos objetos o materiales que aún pueden ser aprovechados, el aporte es significativo. El segundo paso es incentivar programas de reciclaje en la comunidad y entornos cercanos como las escuelas.

2) Naturaleza libre de desechos. Toneladas de botellas, latas, cartones, plástico y desechos orgánicos son arrojados en los parques, playas, bosques y en zonas de importante biodiversidad. La contaminación del suelo y el agua es un grave problema que afecta directamente la calidad de vida de las personas, aunque contradictoriamente sean las actividades humanas las que exponen al ambiente a una alta cantidad de agentes químicos que tardan años en degradarse y alteran el ecosistema de manera irreversible. La acción para evitarlo es tan sencilla que es vergonzoso no convertirla en un hábito: deposita los desechos en los recipientes dispuestos para la basura, lleva siempre una bolsa para recogerlos y nunca dejes tus desperdicios, envases o residuos en los espacios naturales.

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3) Respira un aire limpio. Otro problema de las grandes ciudades es la cantidad de smog y gases contaminantes del aire que emiten los vehículos automotores todos los días. Podemos comenzar por mantener en buen estado los sistemas de combustión de nuestros carros y crear conciencia en cuanto a un uso más racional del automóvil. Hacer recorridos a pie o compartir el vehículo para disminuir el tráfico diario puede parecer una acción pequeña pero al sumar es más significativa de lo que parece.

4) Sembrar una semilla siempre es buena inversión. Desde la década de 1990 hasta la fecha la deforestación ha reducido casi a la mitad las hectáreas de bosques que existen en el mundo. Una acción que todos podemos hacer es proteger la vegetación cercana a nuestras casas, lugares de estudio o trabajo. Los ambientes urbanos no deben crecer indiscriminadamente sin darle prioridad a los espacios naturales. Un árbol centenario siempre será una ganancia más valiosa que ganar un puesto de estacionamiento.  Y por supuesto no está demás cumplir con una de las máximas de vida: siembra un árbol.

5) Energía con responsabilidad. ¿Qué sería de nuestras vidas sin la luz eléctrica, la televisión, el aire acondicionado y los aparatos electrónicos que usamos a diario? La comodidad que aporta para la cotidianidad el uso de energía eléctrica tiene que ir acompañado de una conciencia ambiental responsable. Disminuir el consumo de electricidad es una gran acción que ayuda a frenar el impacto dentro del ecosistema. Apagar la luz al salir de una habitación y desconectar los equipos cuando no los estás utilizando es sumamente sencillo y puede convertirse en un hábito amigable con el ambiente.