Educación

Proteger la capa de ozono sigue siendo una prioridad

La capa de ozono es parte de la protección natural de la atmósfera terrestre que impide el paso directo de los rayos ultravioletas generados por el Sol. Desde hace casi 30 años existe un alerta sobre los efectos de sustancias químicas utilizadas por el hombre que afectan la capa de ozono y se relacionan con los efectos que tendrían para la vida humana la destrucción de esta capa: alto riesgo de contraer cáncer de piel, alteración del sistema inmunológico, afecciones en los ojos como cataratas y de ser un daño continuo, la vida en la tierra.

Desde 1987 se aprobó el Protocolo de Montreal que compromete a los países a ejercer medidas que ayuden a prevenir la destrucción de la capa de ozono a través de la producción y el uso de productos que la afectan. Desde 1994, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 16 de septiembre como Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono.

La eliminación de uso de sustancias que agotan el ozono han ayudado a disminuir el daño en la capa y ha influido significativamente en la protección de los diversos ecosistemas. Desde 2010 muchos países prohibieron los productos que contienen clorofluorocarbonos como los aerosoles, lacas desodorantes, insecticidas, pinturas, sistemas de aire acondicionado, espumas sintéticas y frigoríficos porque pueden mantenerse activos en la atmósfera durante más de cien años moviéndose despacio a través de ella antes de liberar el cloro que destruye el ozono.

Contaminacion-de-la-capa-de-ozono

De igual manera la emisión de gases producidos por las fábricas y los residuos químicos que producen las corporaciones industrias deben ser responsables de la disminución de sustancias como el metilcloroformo que se utiliza como disolvente en productos de uso común e industrial como pegamentos y pinturas.