Mejorar los hábitos alimenticios es un reto que requiere la guía de un especialista en nutrición y la determinación de lograrlo con disciplina y creatividad. El Método COMA es una vía para aprender a comer y adquirir hábitos de nutrición equilibrada que permanezcan en el tiempo junto a sus resultados
Es común que amigos o familiares nos recomienden la dieta de moda que les ha ayudado a bajar un par de kilos. También es común ver, pasado un tiempo, cómo esa misma persona recupera los kilos perdidos e incluso gana unos adicionales después de haber culminado la dieta. En algunos casos esta tendencia se repite en numerosos momentos de la vida. Un ciclo que nos aleja continuamente de esa meta deseada por todos: alcanzar y mantener nuestro peso ideal.
Ariana Araujo, licenciada en nutrición y magister en Psicología de la Salud, diseñó un método con el cual apoya a sus pacientes a detener para siempre este círculo vicioso y aprender a comer adquiriendo hábitos de alimentación saludable que sean perdurables en el tiempo. Su orientación no se basa en un sistema de puntos ni merengadas de proteína. Se sustenta en la pérdida de peso a través del aumento de la masa muscular y la pérdida de grasa. ¿Cómo? A través de la apropiada combinación de alimentos y el consumo de las porciones necesarias para cubrir nuestro requerimiento calórico y nutricional.
El lema del método COMA (@MetodoComa) es Cambiar Organizadamente la Manera de Alimentarnos. Después de una evaluación individual, la nutricionista diseña un plan ajustado a los requerimientos de la persona: le entrega un cartoncito en el cual aparecen las 5 listas de alimentos (lácteos, vegetales, cereales, carnes, grasas) marcadas con colores. Esta será la fuente que le permitirá al paciente elegir correctamente los alimentos para cada una de sus comidas.
En el plan individual, la nutricionista detalla cuántas porciones grupo de alimentos se pueden comer en cada ocasión.
Además de la apropiada combinación de alimentos para lograr platos equilibrados, Aruajo recalca otros hábitos que son indispensables, tanto para lograr y perpetuar el éxito, como para mantenernos saludables:
• Practicar ejercicio físico al menos una hora tres días a la semana o media hora cinco días a la semana.
• Evitar las frituras y elegir métodos de cocción más saludables (al horno, a la plancha, sancochados).
• Utilizar especias para condimentar y evitar el uso de adobo y cubitos que son altos en sodio.
• Tomar de 6 a 10 vasos de agua cada día.
• No fumar, ni tomar alcohol en exceso.
Lecciones para no olvidar
Lo más importante es entender que cada persona tiene un requerimiento nutricional particular, derivado de su constitución física, estado de salud y exigencias de su rutina. Un deportista, un niño y un anciano deben alimentarse tomando en cuenta su realidad particular.
Cambiar nuestros hábitos no es tarea fácil, pero con el apoyo de un especialista y nuestra voluntad, podremos lograrlo. Para alcanzar la meta es necesario ser constante, tener paciencia y entender que se trata de adquirir un comportamiento nutricional saludable para la vida y no sólo para quitarnos un par de kilos antes de las vacaciones o al inicio del año. Es mejor tomar el camino largo que nos conduce a un resultado seguro y saludable que elegir opciones rápidas pero fugaces que incluso podrían poner en riesgo nuestra salud.
Coordenadas de la orientación:
Ariana Araujo dirige un servicio de nutrición integral que ofrece orientación en esta materia a todo el ciclo de la vida, desde la pre-concepción hasta la vejez. Su equipo está especializado en todas las áreas relacionadas con la nutrición: Magaly Hernández es nutricionista y consejera en lactancia materna; Enmanuel Velásquez es nutricionista y especialista en diabetes; Daniela Brusca es psicólogo clínico y psicoterapeuta bariatra; Marlene Maiz es pediatra; y María Alejandra Aponte es internista y endocrinólogo.
Te invitamos a descargar e imprimir esta infografía que te dará ideas para comer mejor:
