Los adultos respiran aproximadamente 20.000 veces al día, o lo que es lo mismo por cada minuto que respiramos los pulmones se mueven entre 15 y 20 veces.
Los pulmones sanos garantizan el ritmo adecuado de nuestra respiración y la oxigenación necesaria al cerebro. Pero el humo del cigarrillo es el principal agente tóxico del aire que entra a nuestros pulmones. Un pulmón enfermo, además de inhibir la respiración, causa enfermedades como asma, bronquitis crónica o enfisema y es un órgano vulnerable a infecciones como la influenza, la neumonía e incluso tuberculosis.
En Venezuela existe un decreto oficial que garantiza espacios 100% libres de humo de cigarrillo. De esta manera establecimientos, restaurantes, centros comerciales y una importante cantidad de espacios públicos pueden mantener el aire limpio para beneficio de quienes no son fumadores. 
Además del cáncer de pulmón, el cigarrillo ocasiona lo que se conoce como Epoc -Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica– que no tiene cura y origina entre 80 y 90% de las muertes asociadas a estas afecciones. También es la tercera causa de fallecimientos en países con alto consumo de cigarrillos, como Estados Unidos.
Al dejar de fumar puedes recuperar la capacidad pulmonar que ha estado comprometida durante años. Y mientras los pulmones hacen el trabajo de limpiarse de manera natural puedes ayudarte consumiendo estos alimentos:
