La alergia es una reacción exagerada que genera el sistema inmune del cuerpo ante algunos agentes externos, que para muchas personas pueden ser totalmente inofensivos. Por eso es importante conocer y aprender a identificar qué tipo de sustancias pueden desencadenarnos una alergia.
Hay tres tipos de alergia: respiratorias, de piel y de ojos. Pueden ocurrir por reacción a alimentos, animales, sustancias químicas y agentes ambientales
El polvo contiene partículas mínimas con presencia de ácaros y al entrar en contacto con nuestros pulmones provocan una reacción. Se manifiesta con enrojecimiento de nariz y ojos, irritación de las mucosas, estornudos, tos o irritación de las fosas nasales, al punto de disminuir la capacidad de respirar.
Debemos estar atentos a esre tipo de alergias pues a veces el pelaje de los animales puede tener partículas de caspa altamente alergénicas. Las secreciones de salivas de animales como reptiles, perros y gatos cuando se secan se dispersan en el aire y entran al sistema respiratorio humano generando una reacción alérgica. Muchas personas desconocen que tienen este tipo de alergia hasta que entran en contacto con animales que inmediatamente les generan enrojecimiento de la piel, ardor, picazón y molestias en ojos, nariz y piel.
Es más frecuente de lo que parece. Hay ciertas comidas que contienen proteínas o glicoproteínas que producen hinchazón y reacción en algunos organismos. En la infancia se suele detectar este tipo de reacciones con alimentos como el huevo y la leche pero hay otras que se desarrollan durante la adolescencia como la reacción alérgica a frutas, pescados y mariscos, frutos secos como el maní y la almendra e incluso a algunas verduras y vegetales.
La alergia a los alimentos resulta más peligrosa que las de otro tipo porque se manifiesta a través de la piel, afecta el sistema digestivo, las vías respiratorias y en casos extremos reacciona en los tres de manera simultánea, lo que impide al afectado ver por la hinchazón que sufre en los ojos, le dificulta moverse, hay ardor, le afecta la capacidad de hablar y, en el peor de los casos, ni siquiera puede respirar.
Por eso es importante que la persona manifieste su tipo de alergia cuando come en restaurantes o en reuniones. También debe leer en las indicaciones que vienen en los empaques de los productos si estos alimentos contienen trazas, o bases de preparación con algún alimento del cual es alérgico.